Página 35 - APF_V03_N01_2014

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Revista APF 3(1) 2014
Revista Agropecuaria y Forestal APF
3(1): 29-38. 2014
Momento óptimo de cosecha del aguacate (
Persea americana
Mill.
)
cv. ‘Semil 34’ en la República Dominicana
María Cuevas
1
Los aguacates dominicanos se caracterizan por su heterogeneidad concerniente a la calidad de la fruta, debido
a que proceden de plantaciones genéticamente heterocigotas, así como por prácticas inadecuadas de pre y
poscosecha. Debido a esto, es importante determinar la edad fisiológica óptima de las frutas para su cosecha. El
objetivo de este estudio fue determinar el momento óptimo de cosecha del aguacate de la variedad ‘Semil 34’. Se
realizaron experimentos independientes en las dos principales zonas productoras del país, Moca (norte) y Cambita
(
sur). Se realizaron ocho cosechas semanales, en una finca comercial en cada localidad. Como indicadores
básicos de calidad, para determinar el momento óptimo de cosecha, se analizaron el contenido de aceite y materia
seca. También, se tomaron como indicadores las características fenológicas, calidad de maduración y los atributos
organolépticos. Bajo las condiciones del estudio, basados en el contenido de aceite y materia seca, los momentos
óptimos de cosecha fueron determinados, siendo 24 semanas después de la floración para la zona de Moca
(9.18%
y 20.02% de aceite y materia seca, respectivamente) y 26 semanas para la zona de Cambita (9.12% y
19.30%
de aceite y materia seca, respectivamente). Organolépticamente los frutos resultaron de buena calidad
para la exportación en ambas zonas estudiadas.
Palabras clave:
contenido de aceite, materia seca, calidad de fruta
1
Investigadora Titular. Instituto Dominicano de Investigaciones Agropecuarias y Forestales (IDIAF). C/Rafael Augusto Sánchez No. 89, Ens.
Evaristo Morales. Santo Domingo, República Dominicana. Correo electrónico:
Introducción
El aguacate (
Persea americana
Mill.) para la República
Dominicana es un cultivo de alto valor comercial, por
su contribución a la socioeconomía, como generador
de empleos y divisas. Esto se demuestra con el cre-
cimiento observado de 100 % en el área sembrada y
el número de productores entre los años 2002 y 2006.
Otro aspecto de importancia de la fruta es que el país
ocupa el séptimo lugar como productor del cultivo a
nivel mundial, con una producción de 295,080 t en el
2011 (
FAO 2013). Además, el cultivo favorece a la pro-
tección del medio ambiente, por ser un reforestador por
excelencia.
Para la producción de frutas de calidad, los productores
nacionales requieren de técnicas precisas que permitan
determinar los períodos óptimos de cosecha. El conoci-
miento de esas técnicas es indispensable porque existe
una gran variabilidad en las condiciones agroecológicas
y de suelos, además de las diferencias a nivel genético,
aún en una misma variedad de aguacate. Esto dificulta
la producción de frutas homogénea y el manejo agro-
nómico, incluyendo la predicción de fechas apropiadas
de cosecha. De esta forma el país podría conformar
sistemas de producción de frutas de superior calidad y
competir en los mercados internacionales con países
productores como Chile y México. Esto contribuiría al
fortalecimiento de la economía local y de los producto-
res de aguacate, en particular.
Estados Unidos y Puerto Rico son los principales mer-
cados del aguacate dominicano, donde tienen normas
claras con los requerimientos de cosecha de los agua-
cates, de acuerdo a la variedad y la zona de siembra.
La cosecha de aguacate en el país se realiza basada
en la experiencia de los productores, quienes general-
mente utilizan como indicadores de madurez: el co-
lor y el tamaño de la fruta. Sin embargo, para algunos
autores, estos indicadores no son confiables (Cajuste
et al.
1994).
Esto provoca una amplia variabilidad en
la calidad de la fruta, perjudicando de manera direc-
ta su valor comercial y a los consumidores finales, al
tiempo que debilita el sistema de comercialización de la
misma. Las medidas son cada vez más exigentes, con
la agravante de que EE. UU. no permite la entrada del
fruto del país antes de mediados de octubre (Severino
2005),
momento en que en ese país consideran las fru-
tas dominicanas han alcanzado la madurez deseada.
La Ley 422 del Estado de California, promulgada en el
año 1925, sobre la estandarización del contenido de
aceite del aguacate, fijó que el contenido mínimo de
aceite para el peso fresco de la pulpa es de 8 %. Es
conocido que este contenido varía de un cultivar a otro
y, también, depende del clima donde se desarrolla el
cultivo, Lee (1981) citado por López (1998) y Mortons
(1987).