Editorial

La agricultura en el siglo XXI se enfrenta a múltiples desafíos, según la Organización de las Naciones Unidas paqra la Alimentación y la Agricultura (FAO), ésta ha de contribuir al desarrollo global de los países en vía de desarrollo. Estos países son dependientes de la agricultura y en gran parte están obligados a adoptar métodos de producción más eficaces y sostenibles y adaptarse al cambio climático. Otros desafíos son producir más alimentos y fibras a fin de alimentar a una población creciente, con mano de obra reducida, así como la demanda de materias primas para un mercado de bioenergía creciente. Se estima que la población mundial aumente en más de un tercio, 2,300 millones de personas entre 2009 y 2050.

Se prevé que casi todo este crecimiento tendrá lugar en los países en vía de desarrollo. Se pronostica que la urbanización seguirá aumentando a un ritmo acelerado; que las áreas urbanas pasarán a representar el 70% de la población mundial en 2050, frente al 49 % en la actualidad; y que la población rural, tras alcanzar un nivel máximo a lo largo del próximo decenio, disminuirá. Las proyecciones muestran que para alimentar una población mundial de 9,100 millones de personas en 2050 sería necesario aumentar la producción de alimentos en un 70 % entre 2005 y 2050.

La producción en los países en vía de desarrollo casi tendría que duplicarse. Ello implica un aumento importante en la producción de varios productos básicos fundamentales. La producción anual de cereales, por ejemplo, tendría que incrementarse en casi mil millones de toneladas y la producción de carne en más de 200 millones de toneladas hasta alcanzar un total de 470 millones de toneladas en 2050.

La investigación agropecuaria y forestal de República Dominicana tiene el gran desafío de producir tecnologías que disminuya sustancialmente los costos de producción de los principales cultivos que forman parte de la canasta básica. Utilizando agricultura sostenible y preparando insumos con materiales locales de fácil adquisición para los productores. Para que estos puedan abaratar costos de producción y ser más competitivos frente a los demás países productores que forman parte de los distintos acuerdos comerciales.

La Sociedad Dominicana de Investigaciones Agropecuarias y Forestales (SODIAF), una sin fines de lucro, tiene como misión estar comprometida con la formación, crecimiento, ética y condiciones de trabajo de los investigadores; promueve la calidad y difusión y pertinencia de las investigaciones, la cooperación nacional e internacional y orienta a la sociedad dominicana sobre el desarrollo científico y tecnológico del sector agropecuario y forestal. Por esta razón la Junta Directiva de la SODIAF (2014-2016) se siente satisfecha al entregar este nuevo número de la revista APF V4N1 2015 a la comunidad científica dominicana, así como a los estudiantes, técnico y productores del país.

La SODIAF pide a los demás integrantes del SINIAF constituido por el Consejo de Investigaciones Agropecuarios y Forestales (CONIAF), Instituto Dominicano de Investigaciones Agropecuarias y Forestales (IDIAF), al Instituto de Biotecnología (IIBI) y a las facultades de agronomía de las universidades UASD, ISA, UNPHU, UCATECI, ITECO a trabajar todos unidos de la mano y en la misma dirección por el fortalecimiento del sistema Nacional de investigación Agropecuarios y Forestal del país.

 

Ing. Elpidio Aviles, MSc..
Presidente de la Junta Directiva SODIAF 2014-2016.